El espectáculo resultó deslucido al quedar parte del material sin explotar.

En la tirada de fuegos artificiales de la noche del sábado se registraron dos averías en el sistema de disparo que impidieron el correcto desarrollo del espectáculo, que se vio sensiblemente deslucido al quedar parte del material sin explotar.

En concreto el fallo se generó en las mesas de disparo, tanto en la principal como en la de repuesto, por lo que se recurrió a un encendido manual quedando parte de la colección sin quemar. Se realiza actualmente un inventario para determinar exactamente cuánto.