En el primer trimestre de 2017 estará listo el enlace de la N-232 y la LO-20 con la autopista en Recajo
El ministro de Fomento en funciones, Rafael Catalá, ha visitado las obras de conexión de la carretera N-232 y la autovía LO-20 con la autopista AP-68, en Recajo (La Rioja), que se iniciaron en marzo de 2015 y que se encuentran ejecutadas en un 60%.
El ministro ha destacado que gracias a estos trabajos “la conexión se va a hacer de manera mucho más natural, fluida y ágil, además de con mayor seguridad para el tráfico y mucho menor impacto en las localidades de Recajo y Agoncillo, ya que se eliminarán muchas molestias en ambos términos municipales”.
Actualmente, los vehículos que circulan por la autopista AP-68 sentido Miranda de Ebro y desean tomar la autovía LO-20 hacia Logroño Este o dirigirse hacia la autovía A-12 en dirección Pamplona, deben abandonar la autopista en la salida 13 (Agoncillo), tomar la carretera N- 232 y atravesar las travesías Agoncillo y Recajo hasta alcanzar la LO- 20. Lo mismo sucede en sentido contrario. Una vez finalicen las obras del nuevo enlace los usuarios podrán abandonar la autopista en una salida que les conducirá directamente hacia la autovía LO-20, evitándoles el paso por las citadas travesías. De esta forma se mejorarán los tiempos de recorrido, a la vez que disminuirá el tráfico de la N-232 a su paso por las poblaciones de Recajo y Agoncillo.
El presupuesto de las obras asciende a 13,5 millones de euros. La inversión total de la actuación, incluidas las expropiaciones, la redacción del proyecto y el control y vigilancia de las obras, asciende a 16 millones de euros.
Esta actuación se encuentra recogida dentro del Convenio suscrito el 15 de marzo de 2010 entre la Administración General del Estado y Autopista Vasco-Aragonesa, Concesionaria Española, S.A.
Características técnicas
Este nuevo enlace partirá de la glorieta sur del enlace de Recajo existente, con la LO-20 y la N-232. A partir de esta glorieta se dispone un ramal de conexión que da acceso a la nueva playa de peaje desde la cual nacen el resto de ramales que sirven a todos los movimientos de conexión con la autopista AP-68.
Para el cruce sobre la autopista de dichos ramales se construyen dos estructuras de 87 y 142 m de longitud conformadas por sendos tableros de vigas prefabricadas de canto variable, que se sustentan mediante estribos y pilas prefabricadas cimentadas mediante pilotes de 25 m de longitud. Se restituyen asimismo los caminos interceptados ampliando el actual paso inferior bajo la AP-68 y construyendo uno nuevo bajo los ramales, ambos con tipología de cajón de hormigón armado de 7 x 5 m de sección.
Además se ejecutarán tres muros, uno de escollera y dos prefabricados de tierra armada, en separación de ramales y para evitar que el derrame de tierras afecte a los depósitos de agua de Agoncillo y a una industria de cerámica.Asimismo, se contempla la reposición de los servicios afectados de gas, de abastecimiento de agua, acequias de riego, líneas de teléfono y fibra óptica y dos líneas eléctricas de alta tensión, así como el cambio de ubicación de los depósitos de agua.
Integración ambiental
Como medidas de integración previstas en la Declaración de Impacto Ambiental destacan el acopio, conservación y posterior reposición de la tierra vegetal, la hidrosiembra de 99.000 m2 de taludes y la plantación de 1.854 unidades de especies autóctonas.