Ceniceros destaca el papel de la AVT “como altavoz de las víctimas y ejemplo en la lucha cívica frente al terrorismo”
El Ejecutivo riojano renueva el convenio con esta asociación para la asistencia legal, psicológica y administrativa de las víctimas en la región.
El presidente del Gobierno de La Rioja, José Ignacio Ceniceros, ha destacado la importancia social de la Asociación Víctimas del Terrorismo como “altavoz de las víctimas y ejemplo en la lucha cívica frente al terrorismo” y ha insistido en que estar a su lado “supone proclamar nuestro compromiso por la defensa de la democracia, el Estado de Derecho, la libertad y la justicia”.
Así lo ha señalado durante el acto de renovación del convenio que el Ejecutivo riojano mantiene con esta asociación, que cuenta en La Rioja con 80 asociados, y que han firmado el consejero de Políticas Sociales, Familia, Igualdad y Justicia, Cornado Escobar, y el presidente de la AVT, Alfonso Sánchez.
Para José Ignacio Ceniceros, las víctimas y sus familiares constituyen “un referente ético frente a quienes aprovechan el paso del tiempo para intentar blanquear” ya que, según ha alertado, “como si nada de lo que todos hemos visto hubiera pasado, hay quien está utilizando artificios semánticos para reescribir la negra etapa de la actuación de la banda terrorista ETA”.
Ante esta situación, ha subrayado que las víctimas del terrorismo deben saber que no están solas y que la sociedad, comenzando por las instituciones, les reconoce su sufrimiento y el importante papel que han jugado. “El Gobierno de La Rioja, en nombre de la sociedad riojana, estará siempre del lado de la víctimas, no del de los verdugos, y trabajará para que en nuestra sociedad prevalezca siempre la memoria, la dignidad y la justicia”, ha declarado.
En este sentido, ha explicado que el convenio reconoce expresamente el trabajo diario que realiza la AVT para ofrecer a las víctimas asistencia legal, psicológica y administrativa. En concreto, y según ha detallado, los 17.500 euros con los que está dotado el convenio permitirán profundizar en un programa de atención psicológica con intervenciones individualizadas para “superar el drama que supone sufrir el desgarro de la violencia”.