El Banco de Sangre de La Rioja triplica sus reservas de sangre en el último año
El número de donantes nuevos en 2016 es de 1.113 personas, lo que supone un incremento del 11,07% con respecto a 2015, la mejor cifra desde 2011.
El Banco de Sangre de La Rioja ha finalizado 2016 con la mayor reserva de unidades de sangre de los últimos seis años. Salvo las reservas de A-, todas los demás grupos sanguíneos han experimentado notables incrementos con respecto a años anteriores.
Según la consejera de Salud, María Martín, que ha hecho pública hoy la actividad del centro riojano con el director técnico del Banco de Sangre de La Rioja, Carlos Sola, son unos datos para sentirse “satisfechos, tanto desde el punto de vista asistencial, como por la capacidad de la sociedad riojana para implicarse en un proyecto solidario como éste”. Martín y Sola han dado “las gracias a todos los donantes”.
El responsable del banco ha indicado que las reservas de sangre “se han triplicado en este último año y se han incorporado 1.113 donantes nuevos”. Esta es la mejor cifra de incorporaciones desde 2011 y, por ello, el director técnico del Banco de Sangre de La Rioja se muestra “satisfecho”, aunque ha reiterado la importancia de “seguir incorporando nuevos donantes, ya que todavía tenemos gran capacidad de crecimiento en este sentido y podemos ayudar a muchas personas”. Sola ha explicado que “un donante que realiza dos donaciones al año, puede ayudar hasta a 6 personas”.
Volviendo a las cifras que aporta el informe presentado esta misma mañana, un año más el Banco de Sangre garantiza la autosuficiencia de componentes sanguíneos y se han podido atender todas las necesidades transfusionales de los pacientes en los hospitales de la comunidad.
El director del centro riojano de transfusión también ha declarado que “el Banco de Sangre de La Rioja tiene como objetivo certificar un número suficiente de donaciones para autoabastecer las necesidades transfusionales en nuestra región. Es decir, el objetivo prioritario del Banco de Sangre pasa por conseguir la autosuficiencia de componentes sanguíneos manteniendo, a su vez, una proporción adecuada entre las donaciones de sangre y los requerimientos transfusionales de los pacientes”. En este aspecto, 2016 se cerró con el mayor porcentaje de stock de componentes sanguíneos desde el año 2010, triplicando las existencias en comparación con las mismas fechas de 2015. Sola ha añadido que este dato “garantiza que los pacientes riojanos tengan cubiertas sus necesidades transfusionales gracias a la solidaridad de los donantes que cada día se acercan a la unidad móvil y al Banco de Sangre”.
Por grupos sanguíneos, las reservas del grupo A+ se han incrementado un 745% respecto a los datos obtenidos a finales de diciembre de 2015. Un 329,11% han aumentado las existencias de 0+; un 20% las de 0-; un 34,48% las de B+; un 333% las de B-; un 33% las de AB+; y un 50% las de AB-. Por su parte, los componentes del grupo A- han experimentado un leve descenso, cifrado en el 3,3%.
Nuevos donantes
Además, el Banco de Sangre de La Rioja mantiene como una de sus finalidades obtener una tasa de reemplazo de donantes nuevos que contrarreste la pérdida de donantes en retirada o inactivos. Este pasado 2016, como ya se ha apuntado, el Banco de Sangre de La Rioja consiguió un total de 1.113 donantes nuevos, lo que supone un incremento del 11,07% respecto a 2015 y la mejor cifra de donantes que accedieron por primera vez a la hemodonación desde el año 2011.
El año 2016 se cerró con 10.030 donaciones de sangre efectuadas por 6.918 donantes. Este dato determina que cada donante realizó una media de 1,45 donaciones a lo largo del pasado año. El director del centro de donación riojano ha explicado que los hombres pueden realizar un máximo de cuatro donaciones cada doce meses y las mujeres tres. Por ello, ha animado a todas las personas “a que realicen, al menos, dos donaciones al año, acción que ofrece la posibilidad de mejorar el estado de salud a seis pacientes en vez de a tres”. Sola también ha recordado que “la necesidad de una transfusión sanguínea es un hecho mucho más habitual de lo que pensamos, ya que aproximadamente cuatro de cada cinco personas necesitaremos una transfusión a lo largo de nuestra vida”.
La caducidad de los componentes sanguíneos hace que el Banco de Sangre fomente la hemodonación de manera uniforme, manteniendo un flujo estable durante todo el año. En este caso, Sola ha resaltado que “los concentrados de hematíes se pueden conservar durante 42 días, las plaquetas de 5 a 7 días y el plasma se puede almacenar durante tres años”.
Durante 2016, el porcentaje de hombres donantes fue del 58,54% y el de mujeres del 41,46%, dato que recorta en más de un punto la distancia entre ambos sexos en relación a 2015. Sola ha destacado que las mujeres donan más que los hombres en los grupos de edades más jóvenes, a razón de 1,35 mujeres donantes por cada hombre menor de 30 años. Esta tendencia se invierte en la década de los 31 a los 40 años, donde 1,48 hombres donan sangre por cada mujer donante. Esta diferencia se ve ampliada a 1,70 hombres por cada mujer donante a partir de los 41 años de edad.
Por grupos de edad, el 19,97% de los donantes tenía entre 18 y 30 años en el momento de realizar la hemodonación; el 20,22% entre 31 y 40 años; el 28,80%, de 41 a 50 años, el 29,84%, de 51 a 65 años; y el 1,14%, más de 65 años.
Actividad en la unidad móvil
Sola ha añadido que “el 74% de las donaciones se han obtenido en la unidad móvil de hemodonación, que durante 2016 realizó un total de 519 desplazamientos a 95 puntos de nuestra región”. El director técnico del Banco de Sangre ha señalado que el restante 26% de las donaciones se han realizado en el Banco de Sangre y ha animado a hacer uso del punto fijo de donación a todas las personas con un buen estado de salud que por diversas circunstancias cada día se desplazan hasta el Hospital San Pedro.
¿Quién puede donar sangre?
Los únicos requisitos para poder donar sangre consisten en ser mayor de edad, pesar más de 50 kilos y contar con un buen estado de salud. Los hombres pueden donar cuatro veces al año y las mujeres en tres ocasiones con un periodo mínimo de 60 días entre una donación y la siguiente.
El proceso de donación consta de cuatro pasos. En primer lugar se debe presentar el DNI para que la donación sea registrada e identificada. A continuación, se tomará la tensión arterial, se medirán los niveles de hemoglobina y se completará un cuestionario médico. Posteriormente, se realizará la donación sanguínea, que durará aproximadamente 10 minutos. Para finalizar, el donante tomará un refrigerio, agua o un refresco a fin de recuperar el volumen de sangre extraído.