La portavoz socialista en la comisión de Presidencia y Acción Exterior, Sara Orradre, ha lamentado en primer lugar que, en materia de cooperación al desarrollo, “el presupuesto de 2017 no contempla ninguna mejora con respecto a ejercicios anteriores, en los que ya se venían planteando recortes muy importantes en esta área”.

Por otra parte, y teniendo en cuenta el grado de ejecución presupuestaria de 2015, la administración de José Ignacio Ceniceros “parece seguir estando más preocupada por modificar partidas para terminar destinándolas a publicidad y propaganda que por garantizar el cumplimiento de sus compromisos presupuestarios en el ámbito de la cooperación”. Un escenario “especialmente sensible”, ha señalado Orradre, teniendo en cuenta la situación en la que nos encontramos actualmente, “plenamente inmersos en la mayor crisis de refugiados conocida desde la segunda Guerra Mundial”.

En este sentido, la diputada socialista ha señalado no entender como la Consejería de Acción Exterior no asume su responsabilidad para con la crisis de los refugiados, más si tenemos en cuenta que, en el caso de la crisis derivada del conflicto Sirio, existe un mandato parlamentario al respecto en el sentido de destinar ayuda sobre el terreno visto que, a día de hoy, seguimos sin recibir refugiados en nuestro territorio.

“Creemos que la crisis Siria tiene una entidad suficiente como para que esta Consejería se la tome en serio y adquiera un espacio destacado en sus planes presupuestarios. En estas cuentas, no vemos ninguna partida específica destinada a Siria, y seguimos considerando insuficiente la ayuda humanitaria prevista para el reto que tenemos enfrente”, señalaba.

Resulta paradójico que, por un lado, estemos destinando 30.000 euros a becas para la formación de los cooperantes mientras, al mismo tiempo, escatimamos en la cooperación propiamente dicha. “¿De qué sirve formar a jóvenes cooperadores si después no invertimos en cooperación al desarrollo?”.

“Por cierto que, precisamente, el establecimiento de becas para cooperantes era uno de los compromisos que contemplaba el PSOE en su programa electoral”, apuntaba Orradre.

En lo que se refiere a la oficina de retorno de emigrantes riojanos, la diputada socialista ha valorado el hecho de que esta actuación cuente con una partida presupuestaria “seria” de 86.000 para emprender diversas acciones orientadas al retorno juvenil. Si bien, hubiera sido deseable que dicha oficina, comprometida ya en los presupuestos del año 2016, estuviera ya en marcha.