La agencia de calificación Fitch ha emitido un informe en el que mantiene la   perspectiva de la deuda a largo plazo de la Comunidad Autónoma de La Rioja con una calificación de triple BBB con perspectiva estable en emisiones a largo plazo y F2 en emisiones a corto. Para el consejero de Administración Pública y Hacienda, Alfonso Domínguez, «esta calificación respalda la solvencia de la política económica y fiscal desarrollada por el Gobierno riojano, dado que la triple BBB significa alta solvencia y la F2, seguridad muy alta y riesgo de impago muy bajo».

El informe de Fitch destaca el marco institucional estable de la región y reconoce  la mejora de la transparencia en las cuentas y el esfuerzo fiscal positivo de La Rioja, que “continuará mejorando”.

Según detalla la agencia el balance económico de La Rioja en 2017 ha sido positivo por segundo año consecutivo, debido por un lado al incremento de 41 millones de euros provenientes del sistema de financiación y por otro, al ahorro en intereses, por  su participación en el Fondo de Facilidad Financiera habilitado por el  Estado en 2015. En concreto, los gastos de intereses de La Rioja disminuyeron el ejercicio pasado hasta los 16,1 millones de euros frente a los 31,6 millones en 2014.

En este sentido, la entidad destaca que el cumplimiento de los objetivos de estabilidad “sigue siendo una prioridad para La Rioja”, al cerrar el ejercicio con un déficit del -0,36% del PIB, lo que le ha permitido en 2018 acceder de nuevo al Fondo de Facilidad Financiera. El Ejecutivo riojano no descarta permanecer en este mecanismo, siempre y cuando las condiciones que ofrezcan sigan siendo favorables para los intereses de la región.

Respecto a la evolución de la deuda, Fitch prevé que la mejora de la actividad económica y de los ingresos permita reducir el peso relativo de la deuda, y pone de manifiesto la capacidad de La Rioja de financiarse en los mercados para refinanciar la deuda en el medio plazo con tipos de interés moderados.

Por otro lado, Fitch vuelve a destacar que el perfil económico de la región por encima de la media, de hecho estima que los ingresos corrientes continuarán creciendo entre 2018 y 2020 en torno al 4,0% debido al crecimiento económico.

Asimismo, pone de relieve que el PIB per cápita riojano se sitúa un 4,2% por encima del conjunto del país y la tasa de empleo es una de las más alta con un 51,9% en 2017 frente al 48,7% nacional. Además, subraya la mejora del mercado de trabajo en 2018 y destaca la capacidad de la región de crear empleo, que ha crecido un 13,3% desde diciembre de 2013.

El informe de Fitch  señala también que La Rioja cuenta con una población más envejecida que la media española, lo que supone una mayor presión del gasto social y sanitario, aunque considera que esta circunstancia se ve mitigada por el alto nivel de vida de la región y la robustez de sectores como el manufacturero y el agrícola.

Por último, la agencia avanza que la calificación podría elevarse si el Gobierno regional continúa teniendo un balance corriente positivo (ahorro bruto) y reduce la deuda directa en torno al 110% de los ingresos corrientes.