La Policía Nacional sanciona a un hombre en tres ocasiones en menos de veinticuatro horas en Logroño
Agentes de la Policía Nacional sancionaron a un varón por mostrar retirado comportamiento de desobediencia, siendo sancionado en hasta en tres ocasiones en menos de veinticuatro horas. El Ministerio de Defensa, desplegó el Regimiento España XI del Ejército de Tierra, destinado en Zaragoza con más de quince efectivos en Logroño.
Agentes pertenecientes a esta Jefatura Superior de Policía sancionaron hasta en tres ocasiones a un varón por reiterado comportamiento de desobediencia a los agentes en nuestra ciudad.
Los hechos ocurrieron cuando el Regimiento España once Ejército de Tierra, destinado en Zaragoza se encontraba en Logroño, los cuales al preguntar a un varón en una plaza céntrica de Logroño hacia donde se dirigía y el motivo de estar en la vía pública, les manifestó que “el hacia lo que la daba la gana y no le tenían que decir hacia donde se tenía que dirigirse”, motivo por lo que los militares requirió al Cuerpo Nacional de Policía de esta Jefatura, personándose inmediatamente varias unidades adscritas a la Brigada Provincial de Seguridad Ciudadana concretamente la Unidad de Prevención y Reacción. Los cuales sancionaron a este varón, por “mostrar un reiterado comportamiento de desobediencia a los agentes”.
Se trataba de un varón, con domicilio en Calahorra que el pasado martes por la tarde había sido sancionado por los Agentes de la Policía Nacional, ya que había sido interceptado en la vía pública alegando que “había venido en autobús a dar una vuelta por Logroño”. Se le advirtió que debía marcharse a su domicilio en Calahorra, haciendo caso omiso a las indicaciones de los agentes de forma reiterada, siendo sancionado de nuevo al día siguiente por la mañana al encontrase otra vez en la calle, y posteriormente al mediodía, fue interceptado por el Regimiento España once Ejército de Tierra, en la Plaza Tilos.
El artículo número 36 de la Ley de Seguridad Ciudadana regula las infracciones graves, con multas de entre 601 y 30.000 euros, y, en su punto sexto, contempla sanciones por “la desobediencia o la resistencia a la autoridad o a sus agentes en el ejercicio de sus funciones, cuando no sean constitutivas de delito, así como la negativa a identificarse a requerimiento de la autoridad o de sus agentes, o la alegación de datos falsos o inexactos en los procesos de identificación”.