Logroño contará con un carril bici que unirá el barrio de El Campillo y Las Norias por el Puente Sagasta
Las Norias dispone de 60 aparcabicis que se suman a los que se han instalado recientemente en Logroño.
El lunes comenzará la transformación del carril derecho del Puente Sagasta en carril bici bidireccional que mejorará la accesibilidad ciclista al barrio de El Campillo y a Las Norias.
El concejal de Desarrollo Urbano Sostenible, Jaime Caballero, ha presentado el nuevo carril bici que unirá el barrio de El Cubo con el barrio de El Campillo y Las Norias a través del Puente Sagasta (conocido cuarto Puente).
Con este tramo se pretende conectar de forma inmediata el itinerario del parque de La Isla con Las Norias, que actualmente solo cuenta con la pasarela peatonal adosada al puente y se satura con el uso peatonal y ciclista, por lo que “este carril mejorará mejora significativa en la convivencia de peatones y ciclistas”, tal y como ha explicado Caballero, quien ha afirmado que el tramo ciclista “conectará el barrio de El Cubo con el de El Campillo, cuestión que ahora es también especialmente necesaria al estar cortado el Puente de Piedra, y también para ir tejiendo una red de itinerarios saludables”.
De esta forma, al carril de circulación que queda para tráfico motorizado, se le instalarán delimitadores de velocidad para evitar los excesos que permanentemente son denunciados por el vecindario del entorno.
Se trata de una actuación enmarcada en la estrategia “Logroño Calles Abiertas” que pretende promover la movilidad activa en nuestra ciudad a través de una Red Ciclista Saludable. “El objetivo es crear un conjunto de itinerarios ciclistas en ejes prioritarios y secundarios, con intervenciones pensadas tanto para personas habituadas al uso de la bicicleta como para quienes se sienten más vulnerables ante el tráfico”, ha afirmado Jaime Caballero. Otra de las pretensiones, ha dicho el concejal de Desarrollo Urbano, “es promover la movilidad activa y la bicicleta en estos momentos ayuda a descongestionar el transporte público y mantener la distancia de seguridad, así que seguiremos tomando medidas que mejoren la comodidad y la seguridad vial y sanitaria, y una de ellas es la creación de carriles bici”.
La movilidad activa suponía antes de la pandemia más del 60% de los desplazamientos en Logroño, aunque la bicicleta sólo alcanzaba el 2% del total, muy poco para una ciudad de distancias cortas y plana.
Nuevos aparcamientos de bicicletas
También se han presentado los nuevos modelos de aparcamientos para bicicletas que se han instalado junto a las instalaciones de Las Norias. Se trata de aparcamientos realizados con vallas de. Rubén Antoñanzas, concejal de Deportes, ha afirmado que “con este servicio damos respuesta a una petición muy extendida entre los usuarios de Las Norias, a los que les gusta desplazarse hasta aquí en un medio con el que hacen ejercicio, es económico y no contamina. El fomento de los desplazamientos en bicicleta como hábito saludable entra dentro de los objetivos de Logroño Deporte y para ello resulta fundamental dotar a los logroñeses de estos elementos en los que aparcar sus bicicletas con seguridad y comodidad”.
Se trata de aparcabicis provisionales realizados con vallas a la espera de que el Ayuntamiento de Logroño pueda contar con los módulos itinerantes que están actualmente en proceso de licitación. Las vallas que se han colocado podrán alojar unas 60 bicicletas.
El Ayuntamiento de Logroño, a través de la Concejalía de Desarrollo Urbano Sostenible, ha instalado 22 nuevos espacios de aparcabicis en la ciudad con el objetivo de favorecer la movilidad sostenible y ofrecer más opciones de estacionamiento.
Logroño cuenta con 145 espacios de aparcamiento de bicicletas, con un total de 687 horquillas y 1.276 plazas.
El concejal de Desarrollo Urbano, Jaime Caballero, ha afirmado que “en las últimas semanas el número de usuarios de bicicletas en Logroño se ha incrementado como una respuesta clara hacia la nueva movilidad urbana, en la que este medio de transporte se presenta como una alternativa para mantener la distancia interpersonal; evitar el uso de vehículo motorizado para mantener bajos los índices de contaminación y ruido; y ceder las plazas del transporte público colectivo a quienes más las necesita”.