La Policía Local pone en funcionamiento un nuevo radar de última generación para reducir la velocidad en el casco urbano de Logroño
La Policía Local pone en funcionamiento un nuevo radar cuyo objetivo es reducir la velocidad en el casco urbano y el número de accidentes que se producen en Logroño. El dispositivo tipo pistola-radar es de última generación.
El inspector de Policía Local, Pedro Merino, ha subrayado que “la seguridad vial no la realiza la Policía ni la Administración sino que la realizamos cada ciudadano y ciudadana con nuestra conducta, por eso el mensaje que queremos enviar es que tenemos que convivir todos en la circulación”.
Asimismo, ha recalcado, “se buen conductor no consiste en tener unas habilidades especiales en el uso del volante sino en ser conscientes de que tenemos que respetar los derechos de los demás, y eso se consigue cumpliendo con las normas de tráfico”
El nuevo modelo de radar, a diferencia de los modelos antiguos, no funciona con ondas de radio sino con tecnología láser que mejora la calidad y eficacia del aparato. Entre sus prestaciones destaca su capacidad de captar la velocidad de un vehículo y sacar fotografías nítidas a 700 metros de distancias; su reducido tamaño lo hace manejable y versátil al poderse colocar en cualquier ligar sin influir en las maniobras evasivas de los conductores; y su tecnología digital permite obtener información de cada infracción con detalle, tanto de la velocidad como de otras infracciones como el uso del móvil al volante o la no utilización del cinturón de seguridad.
También estos nuevos modelos de tamaño compacto y con rangos de uso de distancia mayores pueden colocarse en puntos de alta siniestralidad, ya que no requieren vehículo soporte o medios adicionales, y aportan la ventaja de que mientras que los dispositivos fijos son solo útiles en el punto kilométrico en el que están instalados los radares móviles se ha demostrado que tienen una capacidad de disuasión muy superior.
El aparato ya está en funcionamiento, después de que haya terminado la fase de pruebas y se haya demostrado su eficacia, y tras un periodo de formación de los agentes encargados de su uso.
Accidentes de tráfico en el casco urbano
Avenida de la Paz, Avenida Salustiano Olózaga, Circunvalación (LO-20), Piqueras, Gran Vía, Avda. de Burgos, Duquesa de la Victoria, Vara de Rey, Duques de Nájera, Pérez Galdós y Avenida de Madrid son las vías con mayor número de accidentes de tráfico en Logroño. Lo han vuelto a ser durante el año 2019 y, además, en ellas se han producido los accidentes de mayor siniestralidad y en los que más personas resultaron heridas.
Estas calles son las más largas de la ciudad y los conductores circulan con mayor velocidad. Por tanto, los datos constatan que la causa más importante de accidentes en el casco urbano pasa por no respetar el límite de velocidad. Además, es determinante en estos accidentes las lesiones de las personas que se ven envueltas. Diversos estudios avalan que la velocidad inadecuada y excesiva al tipo de vía reduce el tiempo de reacción e impide la corrección de la trayectoria y el control del vehículo.
Tanto la Policía Local de Logroño como la Concejalía de Desarrollo Urbano Sostenible consideran que lo deseable es la concienciación ciudadana para disuadir a los conductores de las consecuencias de superar los límites de velocidad. Pero también los estudios demuestran que este objetivo no se logra sin el uso de radares y controles que desincentiven la velocidad excesiva en los conductores. Por este motivo, la Policía Local ha comenzado a probar en los últimos días un tipo de radar de última generación ya en uso en otras localidades y cuerpos autonómicos. La velocidad en la ciudad incide también en el ruido y en las emisiones de CO2.
A los esfuerzos realizados por los agentes, con el aumento de controles de velocidad y estado de elementos de seguridad de los vehículos, entre otras campañas para la mejora viaria que se realiza para llevar a cabo ese objetivo de descenso en el número y gravedad de siniestros, es necesario un esfuerzo adicional para lograr pacificar la velocidad de tránsito en el casco urbano a los 40 Km/h como regla general y 30 Km/h en las calles residenciales señalizadas.
Si bien el número total de accidentes descienden a 1.437 en el año 2019 respecto de los 1.472 en 2018 y de los 1.568 accidentes en el año 2017, la reducción de esos números no es suficientemente significativa para la consecución de los objetivos de mínima siniestralidad que persigue el Ayuntamiento de Logroño y su Policía Local.
Datos de accidentes por calles
Avenida de la Paz, 35 accidentes.
Avenida Salustiano Olózaga (Circunvalación LO-20), 25
Chile con Salustiano Olózaga, 25
Piqueras, 23
Gran Vía, 20
Av. de Burgos, 18
Duquesa de la Victoria, 18
Vara de Rey, 18
Duques de Nájera, 17
Pérez Galdós, 17
Avenida de Madrid, 17