El Colegio de Enfermeras de La Rioja quiere seguir alzando su voz, aunque sigamos sin ser recibidos ni escuchados por los políticos que siguen haciendo sus programaciones como si la COVID-19 -que desde marzo del año pasado nos puso en estado de alarma a todos, y especialmente a los profesionales sanitarios- ya estuviera más que superada.

Por ello, la presidenta de este Colegio de enfermeras, Elisa Elías, recuerda que “a pesar de estar en pleno mes de agosto y que la tradición nos marca que muy variadas localidades riojanas en tiempos de la perdida normalidad celebraban sus fiestas tradicionales, debemos ser conscientes y advertir que celebrar tanto las fiestas como las denominadas ‘no fiestas’, es un auténtico despropósito. Y por ello trasladamos a quienes nos quieran escuchar que se debería suspender cualquier acto festivo que suponga una desorganizada concentración de ciudadanos hasta que no haya un 80 % de la población riojana doblemente vacunada. Y en esto no queremos hacernos trampas: que hayan recibido las dos dosis de la vacuna”.

Elisa Elías, hace un repaso “a las localidades que deberían haber celebrado sus fiestas, y seguramente han hecho sus ‘no fiestas’ en los chamizos como son los casos de Rincón de Soto o Alfaro, que han despuntado con casos activos, lo que nos lleva a pensar en un total olvido o relajación de las normativas que siguen vigentes en esta Comunidad Autónoma en la fase 2, lo que supone reuniones de máximo de 6 personas, distancia social, mascarilla y uso de hidroalcoholes… al tiempo de aplaudir la actitud del Ayuntamiento de Haro que ha indicado claramente que no van a celebrar sus fiestas de septiembre… Por ello nos preguntamos y preguntamos ¿cuándo vamos a aprender?”.

Desde el Colegio de enfermeras deseamos volver a reclamar la responsabilidad de los ciudadanos “pues si bien la consejera de Salud recientemente ha indicado que cualquiera se va a poder vacunar libremente sin cita previa, nos gustaría que las autoridades ejercieran sus responsabilidades restringiendo al máximo posible las fiestas de este mes de agosto y las que están por venir en el mes de septiembre, como las de Logroño”.

“Hace unas semanas -recuerda Elisa Elías- acercamos a los ciudadanos la reflexión de que era mucho más importante vacunarse que disfrutar de unas vacaciones, dicho de otra forma, preguntábamos ¿cómo se podía pensar en irse de vacaciones antes que en vacunarse? Ahora volvemos nuevamente a reclamar una reflexión a la sociedad para que se olvide de las fiestas patronales de cada localidad. Nos gustaría escuchar también la voz de otros profesionales de la salud en esta Comunidad, pero las enfermeras seguimos trabajando por encima de nuestras posibilidades y deseamos ya dejar de tener tanta presión, sea en planta, en UCI, en el acto de la vacunación o cuando realizamos las PCR. Queremos descansar de tanto trabajo. ¿Tan difícil es de entender por una sociedad seria y responsable? No olvidamos que mantener la actividad económica es un seguro de futuro o que a todos nos gusta disfrutar de las fiestas… pero en esta balanza de la COVID-19, también debemos sopesar que desde marzo de 2020 han muerto en esta Comunidad 812 personas -datos del jueves, 19 de agosto- lo que supone de hecho que en los últimos 18 meses es como si hubieran desaparecido, prácticamente, las poblaciones de localidades como Ausejo o Briones”.

Por todo ello, animamos a los ciudadanos a que se olviden de fiestas y, a cada uno de nosotros a asumir nuestra responsabilidad, para ser más valiosos en la función social que tenemos encomendada. ¿Podemos en estas circunstancias pensar en fiestas? Al Colegio de enfermeras nos parece una broma de muy mal gusto.