Las zonas gastronómicas de La Laurel de Logroño y El Tubo de Zaragoza han sellado en la capital aragonesa un nuevo hermanamiento gastronómico, en el que han participado los alcaldes de ambas ciudades, Conrado Escobar y Natalia Chueca, para defender la calidad, la tradición y los productos de proximidad.

El objetivo de esta alianza es potenciar los barrios gastronómicos de calidad, en este caso de Logroño y Zaragoza. Durante este encuentro se ha colocado el emblema de la calle Laurel y la imagen de la Virgen del Pilar en el chaflán entre las calles de los Estébanes y de la Libertad. Actualmente, el mismo distintivo se encuentra en el número 13 de la Travesía del Laurel de Logroño.

En el acto, celebrado en pleno corazón de El Tubo, también han participado el concejal de Promoción de la Ciudad, Miguel Sainz, y la concejala de Gobernanza, Igualdad y Portavocía, Celia Sanz.