El Ayuntamiento reduce el IBI, congela impuestos como el IAE y consolida las bonificaciones fiscales para continuar apoyando a familias y tejido empresarial
El IBI bajará en medio punto (hasta el 0,575), que sumado al del año pasado supondrá un descenso acumulado de 1,5 puntos en dos años y un ahorro de casi un millón de euros para los logroñeses. El impuesto conocido como plusvalía se reducirá en un 2,5%, mientras que el IAE y el ICIO se congelan. Las tasas y precios públicos se actualizarán conforme al IPC con el fin de adecuarlas al coste de los servicios. Se revisa la tasa por ocupación de terrenos de dominio y uso público con terrazas de veladores pendiente desde hace años y se modifica la zonificación para las terrazas ubicadas en el Casco Antiguo. Aminorar la carga impositiva de los ciudadanos y simplificar trámites, entre los principios inspiradores de la nuevas Ordenanzas Fiscales.
Con el objetivo de continuar apoyando a las familias y al tejido empresarial de la ciudad, el Ayuntamiento de Logroño reducirá las cargas impositivas a la ciudanía en impuestos como el IBI o la plusvalía, además de congelar otros como el IAE o el ICIO y consolidar las bonificaciones fiscales actuales, que en el caso del comercio local se encuentran en el máximo legal permitido. Son solo algunos de los aspectos que incluye el Proyecto de Ordenanzas Fiscales que hoy ha sido presentado por el concejal de Administración Pública, Francisco Iglesias.
“Este proyecto se articula en torno a la reducción de la carga fiscal y la simplificación de los diferentes trámites tributarios de ámbito local para apoyar a las familias logroñesas y estimular el crecimiento del tejido empresarial y económico de la ciudad”, ha señalado Iglesias.
En este sentido, en el ámbito impositivo, las líneas de las nuevas ordenanzas fiscales reducen en medio punto el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), que pasa de 0,58 a 0,575 puntos y se sitúa como uno de los más bajos de las ciudades del entorno.
Este medio punto, sumado a la reducción de un punto el año pasado, supondrá un descenso acumulado de 1,5 puntos en dos años y se traducirá en un ahorro cercano al millón de euros para la ciudadanía.
A esta reducción se suma la del 2,5% que sufrirá el tributo del Incremento del Valor de los Terrenos de Naturaleza Urbana (conocido popularmente como plusvalía) en los coeficientes a aplicar (según las tablas de ámbito nacional) para el cálculo del incremento de valor de terrenos de naturaleza urbana en procedimientos en los que se tribute por el procedimiento de estimación objetiva. “Con esta nueva reducción llegamos al 5% en dos años, que esperamos que sea del 10% al final de la presente Legislatura”, ha añadido el concejal de Administración Pública.
Por su parte, tanto el Impuesto sobre Actividades Económicas (IAE) como el Impuesto sobre Construcciones, Instalaciones y Obras (ICIO) no serán modificados, por lo que continuarán congelados.
Se consolidan las bonificaciones fiscales
En cuanto a los beneficios fiscales, el Proyecto de Ordenanzas Fiscales propone mantener todas las modificaciones introducidas en 2024, que estaban orientados a tres objetivos fundamentales: el apoyo a las familias, el fomento de la actividad económica y las acciones de carácter ambiental.
Se trata, entre otras, de beneficios como la bonificación de hasta el 95% del IBI para locales en los que se desarrollen actividades económicas y se hayan visto afectadas por la realización de obras de titularidad municipal en la vía pública (entre un 50% para afecciones inferiores a 9 meses y superiores a 3; y de un 95% para afecciones superiores a 9 meses); bonificación del 50% del IBI a inmuebles en los que se instalen puntos de recarga para vehículos eléctricos; bonificación del 40% en el IAE sobre la cuota mínima municipal en aquellos casos en que la actividad ejercida en el inmueble se haya visto afectada por obras realizadas en la vía pública con una duración superior a tres meses; o los porcentajes de bonificación por tipo de carburante en vehículos de autónomos de determinados epígrafes del IAE.
Las familias monoparentales o equiparadas continuarán teniendo el mismo tratamiento fiscal que las familias numerosas en las actuales Ordenanzas del Ayuntamiento de Logroño.
Digitalización y simplificación de trámites para obtener bonificaciones
Con el objetivo de facilitar la tramitación de estos beneficios fiscales, se apostará por la digitalización y la simplificación de trámites, aprovechando la puesta en marcha de las Ordenanzas Fiscales de 2025 con la puesta en funcionamiento de las primeras fases de la Administración Electrónica municipal.
“En este sentido, no será necesario pedir al ciudadano documentación habitual, especialmente a la hora de solicitar bonificaciones fiscales, que hasta ahora era necesario presentar, como por ejemplo un libro de familia o un certificado de discapacidad. Esto supondrá un salto importante en cuanto a rapidez y eficacia en la tramitación, dado que el sistema municipal podrá recabar de forma automática esos documentos, tanto de su propio archivo como del de otras administraciones”, ha apuntado Francisco Iglesias.
“A esto se suma la posibilidad de realizar muchas de estas gestiones de forma virtual y ágil, sin necesidad de acudir a las dependencias municipales. Algunos ejemplos son la bonificación del IBI para familias numerosas, la concedida a personas con discapacidad o la bonificación referente a vehículos eléctricos, donde se producirá una reducción importante de la documentación que deberán aportar los interesados y que podrá tramitar de forma digital”, ha añadido el concejal de Administración Pública.
Tasas y precios públicos acordes con el incremento del IPC
Respecto a las tasas y los precios públicos, el Proyecto de Ordenanzas Fiscales plantea su actualización conforme al Índice de Precios al Consumo (IPC) del mes de agosto, un 2,3%, con el objetivo de adecuarlas al coste de los servicios públicos, como el servicio municipal de agua y alcantarillado, los vados o los derechos de examen para una oferta de empleo público, entre otros.
De este modo, se cumple lo que marca la Ordenanza Fiscal de Gestión, Liquidación, Inspección y Recaudación en su artículo 4 y se adecúan al coste de los servicios, como se aconseja en los principios de la Ley de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad Financiera.
“Esta medida responde una mera cuestión de una buena gestión entre ingresos y gastos públicos, donde es necesaria la revisión de las tasas y los precios públicos para aproximar lo máximo posible el coste que suponen estos servicios al Ayuntamiento y lo que el Consistorio recauda por ellos”, ha apuntado el edil Francisco Iglesias.
En este sentido, se ha revisado la tasa por ocupación de terrenos de dominio y uso público con terrazas de veladores y otros elementos complementarios, pendiente desde hace años; mientras que, además, se modifica la forma en la que se graduaba el abono de esta tasa al incluirse una zonificación nueva para las terrazas en el Casco Antiguo.
“Los establecimientos hosteleros con terrazas abonan la tasa en función de la categoría fiscal de su calle, que va de la 1ª a la 5ª. Hasta ahora los que contaban con estos espacios en el Casco Antiguo, por lo general la zona más congestionada, se encontraban en la 5ª categoría, la de menos tributación, mientras que ahora pasarán a la 1ª, por lo que verán incrementadas sus tasas más allá del propio IPC”, ha añadido el concejal de Administración Pública.
La tasa de cementerios, sin actualizar desde hace varios años, también se modifica para dar cobertura a una realidad cada vez mayor, como son los ritos funerarios de población musulmana y cuyos enterramientos conllevan unos costes específicos por el propio proceso funerario.
Entre estas actualizaciones destaca también el dos nuevos precios públicos. El primero para los test de sustancias estupefacientes realizados por la Policía Local, cuyo importe, que ronda los 200 euros, será cobrado al infractor tras dar positivo, al margen del importe de la multa que reciba posteriormente. El segundo será el derivado de la utilización de la cartelería digital municipal o tótems digitales, cuyo precio será de 271,91 euros por una semana y 12 pases de 10 segundos por hora; y un precio reducido de 217,36 euros para diferentes colectivos, tal y como se especificará en la ordenanza.
Mejora continua de trámites y procedimientos
El resto de las modificaciones propuestas en este Proyecto de Ordenanzas Fiscales son consecuencia de la evaluación periódica de la actualidad normativa. Algunas de las modificaciones provienen de incidencias, dudas o sugerencias concretas planteadas por los ciudadanos en los diversos procedimientos administrativos, que se tienen en cuenta para realizar un análisis de las Ordenanza Fiscales.
También se propone la mejora de procedimientos para completan artículos y se clarifican las obligaciones formales de los sujetos pasivos en las bonificaciones fiscales; o se aclara la documentación que debe ser presentada para ser beneficiario de la exención de determinados impuestos, entre otras modificaciones.
“Estamos hablando de una actualización de las Ordenanzas con relación a las remisiones legales, mejorar la redacción y la concreción jurídica de su articulado. Todo ello con el fin de ser más eficientes y eficaces en la gestión de los procedimientos administrativos fiscales y, además, para intensificar las garantías de la ciudadanía”, ha concluido el concejal de Administración Pública, Francisco Iglesias.
El Proyecto de Ordenanzas Fiscales para el año 2025 ya ha sido remitido a los Grupos Municipales, se aprobará en Junta de Gobierno y deberá ser ratificado en el Pleno ordinario del mes de noviembre para su entrada en vigor el 1 de enero de 2025.