La Plataforma de afectados por el desvío de camiones de la N-232 a la Ap-68 denuncia “repostaje más caro, servicios hosteleros de poca calidad y áreas de descanso únicamente para los turismos” dentro de la vía de peaje. De esta manera, los transportistas no paran en La Rioja, intentan hacerlo antes o después, “por los deficientes servicios que ofrece la autopista” según señala.

La entidad asegura que “la decisión tomada por el Gobierno de La Rioja, de obligar el desvío del tráfico pesado de la N232 a la AP 68 en el tramo Tudela-Zambrana, no sólo ha afectado a los negocios que operan en la nacional a lo largo de estos 150 km, sino también en gran medida a los transportistas y por tanto, a la riqueza de nuestra comunidad”. Los transportistas, dicen, “se quejan de los servicios deficientes de una autopista que está adaptada exclusivamente para los turismos”. En el tramo de Tudela a Zambrana hay tres áreas de servicio: Tudela, Calahorra y Logroño, de las cuales sólo funcionan al completo los servicios del área de Logroño, y allí no cabemos, ya que sólo caben entre 20 o 25 camiones”.

Los transportistas piden “que se flexibilice la medida, que les dejen salir a hacer uso de los servicios de la N- 232 a su paso por La Rioja y, en su caso, que liberalicen la AP- 68 y dejen libre circulación por ambas vías”.