Estos dispositivos constituyen una de las medidas más eficaces para disminuir los accidentes de tráfico por salida de la vía.

La red autonómica de carreteras de La Rioja ha estrenado el nuevo sistema de guías sonoras que ha instalado la Dirección General de Tráfico con el objetivo de aumentar la seguridad vial en vías convencionales y disminuir los accidentes de tráfico provocados a causa de la salida del vehículo de la calzada.

En el acto de presentación de este nuevo dispositivo de seguridad han participado el jefe del área de Gestión de la Movilidad de la DGT, Pedro Tomás Martínez; la jefa provincial de Tráfico en La Rioja, Beatriz Zúñiga; el director general de Obras Públicas y Transportes, Carlos Yécora, así como la presidenta de la Federación Riojana de Ciclismo, Begoña Ruiz, y el ciclista Carlos Coloma.

El Gobierno de La Rioja ha colaborado con la DGT en este proyecto pionero facilitando la colocación de estos nuevos elementos en tramos de las carreteras regionales LR-111, LR-113, LR-250 y LR-259 con objeto de alertar a los conductor del abandono involuntario de la vía y conceder un tiempo de respuesta suficiente para corregir la trayectoria y evitar la salida de la vía o la invasión de sentido contrario de la circulación.

Este sistema consta de bandas sonoras longitudinales en ambos márgenes de la calzada, colocadas a finales de 2017, y una serie de medidas complementarias, implantadas en fechas recientes: carteles informativos al comienzo de los tramos afectados, señales de presencia de ciclistas en cambios de rasante y curvas con escasa visibilidad, limitación de velocidad y marcas viales en los arcenes en las carretera para favorecer la convivencia entre vehículos y bicicletas.

El jefe del área de Gestión de la Movilidad de la DGT ha señalado que esta medida “forma parte del trabajo para lograr reducir los accidentes de tráfico en vías convencionales, donde se registra la mayor siniestralidad”. De hecho, en el primer cuatrimestre de este año se ha saldado sin ningún accidente de tráfico con víctimas en los tramos donde se ha actuado. En 2017 la cifra ascendió a 21, con un balance de un muerto, tres heridos graves y 20 de carácter leve.

Por su parte, Beatriz Zúñiga ha incidido en “la importancia de reforzar la protección de todos los usuarios de la vía, en especial, de los colectivos más vulnerables, con el objetivo de favorecer la convivencia entre todos y reducir la siniestralidad vial en aquellos casos en el que el factor humano desempeña un papel determinante, como ocurre en la mayoría de las salida de la vía de los vehículos”.

Por último, Carlos Yécora ha resaltado “la estrecha colaboración del Gobierno de La Rioja con la DGT para avanzar en ese propósito compartido de disminuir los accidentes de tráfico”. Este proyecto se suma a otros dos donde ambas administraciones han trabajado de forma común en apoyo a dos colectivos especialmente vulnerables: ciclistas y motoristas. En el primer caso, mediante la colocación de señales de tráfico dinámicas, que advierten a los conductores de la presencia de ciclistas en las vías, o las nuevas barreras de contención incrementa la protección a los motoristas en caso de salir despedidos del vehículo en un accidente de tráfico.