En un comunicado ambas organizaciones ponen en valor la labor periodística y recuerdan que ésta es “fundamental para garantizar el derecho a la información de los ciudadanos y afianzar la democracia máxime en un momento tan complicado como en el que nos encontramos”.

Las dos entidades muestran su repulsa a las publicaciones que han hecho a través de redes sociales la consejera Raquel Romero y Mario Herrera señalándolo directamente a algunos medios de comunicación como “responsables de alimentar las críticas” que acabarían con la dimisión de Herrera 27 días después de que éste estrellase su vehículo contra un árbol en la madrugada de año nuevo. También, condenan las amenazas sufridas por Herrera así como que se señale a diversos medios y periodistas como instigadores de dichos hechos.

Tanto la APR como el Colegio de Periodistas animan a sus compañeros a “seguir desarrollando su labor para exigir a los poderes públicos información y transparencia para que el ciudadano pueda conocer, juzgar y elaborar su propias opiniones y, de esa manera, garantizar la independencia y la libertad informativa en beneficio de una sociedad libre y democrática”.