Cruz-Dunne denuncia que en especial los centros escolares más antiguos carecen de los medios adecuados para no perder calor, como son las puertas que no encajan correctamente o las ventanas por las que circula continuamente un flujo de aire frío.

El concejal del PSOE Kilian Cruz-Dunne ha denunciado que algunos de los centros educativos públicos, en especial los que tienen más de 25 años y se encuentran en el centro de Logroño, carecen de un asilamiento adecuado, que provoca que por las puertas sin un cerramiento correcto y las viejas ventanas se pierda el calor que se genera.

Ha señalado que el Grupo Municipal Socialista considera que es una prioridad la eficiencia energética y responsable en los centros educativos con la introducción de medidas que permitan no derrochar el calor. En este sentido, ha explicado que “si bien se está realizando un esfuerzo económico por parte de este Gobierno municipal y los anteriores para el cambio de las calderas y el número de calefactores de los colegios, todo queda inutilizado si no se aísla correctamente el edificio con puertas sin huecos y ventanas por las que no entre constantemente un flujo de aire frío”.

Cruz-Dunne ha insistido en que se tienen que actualizar los materiales de aislamiento de los edificios y para ello, ha destacado que el PSOE pedirá que el Ayuntamiento de Logroño realice un estudio con las deficiencias que se encuentren en los centros para actuar de manera inmediata.

El responsable socialista del área de Educación ha recordado que en el Consejo Escolar Municipal se ha expuesto en distintas ocasiones la queja recurrente de que los niños y profesores carecen de una temperatura adecuada en los centros educativos, ya sea porque pasan mucho calor debido a la alta temperatura de las calefacciones o mucho frío por las corrientes de aire.

Ha añadido que a las deficiencias en el aislamiento hay que sumar que en algunos centros sólo existe un circuito de calefacción, que debería ser doble para poder ajustar a la temperatura adecuada a las zonas sur y norte de los edificios. “Este doble circuito supone un coste de alrededor de 10.000 euros, una inversión mínima si tenemos en cuenta que se daría un correcto servicio a los niños y profesores en los centros escolares”, ha concretado.

Por todo ello, Cruz-Dunne ha apuntado que “un centro escolar puede disponer de la mejor caldera o el mejor circuito de calefacción, pero no sirve de nada si no se puede ajustar por zonas y, además, las infraestructuras carecen de un aislamiento correcto que permita la eficiencia energética”.